Despliegue del Grupo de Operaciones Especiales en la evaluación de adiestramiento y alistamiento
El 15 de diciembre, el Grupo de Operaciones Especiales (GOE) perteneciente a la VII Brigada Aérea de Moreno, provincia de Buenos Aires, participó en una evaluación del adiestramiento y alistamiento de los medios y del personal del Comando de Adiestramiento y Alistamiento, mediante un lanzamiento de gran altitud desde el Sistema de Armas C-130 Hercules.
La misión ordenada al GOE consistió en un lanzamiento de gran altitud usando la técnica HALO (High Altitude Low Opening) para insertar una patrulla de operadores encargados de neutralizar un sistema de defensa aérea enemiga situado en los predios de la VI Brigada Aérea de Tandil, provincia de Buenos Aires.
Para este propósito, el personal y el equipo del Grupo se desplazaron a la I Brigada Aérea "El Palomar", provincia de Buenos Aires, donde se equiparon los paracaidistas y se preparó el material de oxígeno necesario para la operación.
Tras el equipamiento, el Grupo abordó un C-130 especialmente acondicionado y despegó hacia la zona de lanzamiento designada. Durante el vuelo hacia el objetivo, una sección del Sistema de Armas IA-63 Pampa III block 2 se unió a la tarea como escolta del Hercules y para brindar apoyo en materia de defensa ante posibles ataques.
El lanzamiento se realizó a una altitud de 28 mil pies, requiriendo 45 minutos de respiración previa de oxígeno para adaptarse a la altitud y evitar la hipoxia tanto para los paracaidistas como para la tripulación.
Pocos minutos antes del lanzamiento se desconectó la consola de abastecimiento de oxígeno de los paracaidistas y se inició la respiración con sus sistemas autónomos.
A 26 mil pies se abrió la compuerta de lanzamiento. En ese momento, la temperatura había descendido a -35°, añadiendo dificultades a la operación.
Después de realizar ajustes por computadora de navegación, se llevó a cabo el lanzamiento de la patrulla en un salto de caída libre y apertura baja de los paracaídas.
Tras más de 2 minutos de caída libre y alcanzar velocidades cercanas a los 320 km por hora, el personal abrió su paracaídas.
En tierra, los operadores navegaron hacia el objetivo y ejecutaron procedimientos simulados para neutralizar el material crítico.
La operación fue una prueba exitosa de las capacidades del GOE y de los Sistemas de Armas participantes, demostrando coordinación y altos estándares en el logro de objetivos.
Fuente: VII Brigada Aérea