Conferencia “Ataque al HMS Invencible”
En horas de la tarde del 4 de junio, La Biblioteca Nacional de Aeronáutica (BNA) recibió al comodoro ¨VGM ¨ (R) Gerardo Isaac, quien deleitó a los presentes con su relato, al recordar su experiencia como uno de los protagonistas del Ataque aéreo al HMS Invencible.
El director de la BNA, brigadier Mario Colaizzo, dio inicio a la ceremonia con la lectura de una reseña sobre la vasta trayectoria del comodoro, quien cumplió 8 misiones de combate durante el conflicto de Malvinas.
"Además de transmitir las experiencias que uno vivió a través de esta charla, lo que a mí me gustaría es que nunca olvidemos, que esta charla sea el recuerdo de los 55 hombres caídos de la Fuerza Aérea y los 649 argentinos que dieron su vida por la patria sin pedir nada a cambio", comenzó diciendo el comodoro, quien también agradeció a la BNA por la invitación.
A partir de allí, con un salón colmado de expectantes oyentes, comenzó la charla testimonial en la que, de la mano de su memoria, relató cronológicamente sus experiencias como entonces alférez, entre el día 2 de abril y hasta el fin del conflicto armado por las islas Malvinas.
Reconocido por su capacidad de liderazgo y conducción, luego de narrar algunas de sus misiones, ahondó profundamente en el ataque al portaaviones Invencible, en el que le tocó integrar la escuadrilla Zonda, el día 30 de mayo de 1982.
Recordó entonces la formación que se adoptó: los dos Super Etendard en el centro, a la izquierda el que portaba el último misil Exocet que se lanzaría contra el portaaviones, al mando del capitán Francisco, al de la derecha lo pilotaba el teniente Collavino. A la izquierda de Francisco, volaban el primer teniente Vazquez y el primer teniente Castillo, ambos en dos A4C, y a la derecha de Collavino, pilotaban las mismas aeronaves el teniente Ureta y el alférez Isaac.
A unas 20 millas del buque británico, se desprendió el exocet de uno de los Etendard y los cuatro A4C continuaron en vuelo tras la estela del misil: "El misil se fue al frente y se perdió en el horizonte, en ese mismo lugar, instantes después, apareció la silueta de un barco enorme. Al tiempo que vi el portaaviones, di potencia a pleno y me pegue lo más que pude al agua".
"Del portaaviones comenzaron a salir dos columnas de humo negro intenso, cuando estuvimos a unos siete km de llegar, sentí en mi cabina una explosión y al mirar hacia afuera, vi un A4C que explotaba", recordó Isaac.
Con la vista al frente nuevamente y a unos 2 mil metros de alcanzar el buque, el comodoro retirado sintió otra explosión aún más fuerte que la anterior: "miré a la izquierda y vi a otro A4C que explotaba, puse la vista al frente y empecé a tirar cañones. Cuando estuve encima del portaaviones (…) comencé a hacer maniobras evasivas para que no me pegaran", narró, al mismo tiempo que agregó: "después de que uno descarga las armas, la única prioridad es la supervivencia" En esta misión, perdieron la vida Vazquez y Castillo
Al finalizar la ceremonia, el comodoro VGM (r) Isaac, fue reconocido con un diploma y una moneda de desafío por su compromiso con la cultura aeroespacial.
El director de la BNA le dedicó emotivas palabras al comodoro Isaac al esbozar: "Sin dudas, hombres como él, veteranos y héroes de Malvinas fueron quienes le confirieron a la Fuerza Aérea Argentina el prestigio y reconocimiento que tiene hoy".