57° Aniversario del fallecimiento del brigadier general Bartolomé de la Colina
El 28 de junio en horas de la mañana, se realizó el acto en conmemoración del 57° aniversario del fallecimiento del brigadier general Bartolomé de la Colina, contando con la presencia de altas autoridades de la Fuerza, como también personal militar superior, subalterno y civil. La celebración estuvo presidida por el director general de Salud, brigadier Carlos Valdés.
Seguidamente, se procedió a dar lugar a la invocación religiosa a cargo del padre Mario Calvani.
A continuación, se pronunciaron palabras alusivas destacando el rol histórico del oficial homenajeado, en la voz del jefe de la División Abastecimiento del Cuartel General, alférez Gonzalo Véliz.
Luego de esta alocución, se dio por terminado el acto, que recordó los 57 años del fallecimiento de esta figura, que enorgullece a todos los integrantes de la Fuerza Aérea Argentina.
Cabe destacar, los antecedentes por su paso en la Institución del brigadier general Bartolomé de la Colina. Nació en la provincia de La Rioja el 20 de octubre de 1894 e ingresó como cadete becado al Colegio Militar de la Nación en marzo de 1913. Después de aprobar un curso especial, entre 1920 y 1921, se incorporó a la Escuela Militar de Aviación con asiento en El Palomar, donde en 1922 recibió el diploma de Aviador Militar.
Durante un año permaneció en el Grupo Nº 1 de Aviación como auxiliar de la sección fotografía y adscripto a la Escuadrilla de Caza, momento que coincidió con la transformación de la Escuela Militar de Aviación original en unidad aérea de combate, siguiendo los dictados del director del servicio de aviación del Ejército, teniente coronel Enrique Mosconi.
Con el grado de teniente primero, fue comisionado al Ejército de Francia donde se especializó en trabajos fotográficos, armamento y tiro de aviación, profundizando sus conocimientos en el tratamiento térmico de metales, usinaje y ensayos. En 1927 se graduó como Ingeniero Aeronáutico.
En el año 1936 fue ascendido al grado de mayor, dirigió la Fábrica Militar de Aviones y luego prestó servicios en la Dirección General de Material, en cuya gestión se desarrolló la primera serie de aviones nacionales.
Con la jerarquía de coronel, en febrero de 1944 asumió el Comando en Jefe de Aeronáutica y gestionó la transición entre el arma de Aviación y la Secretaría de Aeronáutica.
De acuerdo con el nuevo escalafón, ascendió a brigadier y el 4 de enero de 1945, fue nombrado primer secretario de Aeronáutica, retirándose en marzo de 1949 con el grado de brigadier general.
Además de aviador militar e ingeniero aeronáutico y militar, le concedieron los diplomas de Oficial de Estado Mayor de Aeronáutica y de Estado Mayor del Ejército, ambos Honoris Causa. En 1966 se lo reconoció como Precursor de la Aeronáutica Argentina.
Su fallecimiento se produjo en Córdoba, el 27 de junio de 1967 a los 73 años.